En la esfera del deporte rey, donde los corazones laten al ritmo del balón), coexisten situaciones de emoción extrema y riesgo. Uno de los episodios que más pavor generan entre los futbolistas es la sanción máxima. Este momento delicado representa el final abrupto en el encuentro, relegando al imprudente futbolista a las gradas. La tarjeta